26.12.06

Narración verídica desde Ábaco Libros y Café

Salvador mira con descuido lo que le rodea. Busca algo que no está aquí. Tal vez su mente permanezca en completa búsqueda: una constante de reflexiones y la incesante palabra que lo inquieta y que orbita en su cabeza desde siempre.

Enseguida entran dos personas de blanco. Una mujer y un hombre. Turistas. El hombre no me interesa para nada. Aparentemente es uno de los seudo-intelectules que por aquí abundan. La mujer juguetea con su bolso. Parece pesado. Posa la correa sobre su cabeza. No habla. Tal vez no piensa. Salvador la mira, la repara, mira su culo, su espalda, sus tetas, su culo una vez más. Se quedan sus ojos allí un rato y regresa a su cabeza. El desolado ambiente en Ábaco nos jode a todos de alguna manera. Estamos colgados anhelando libertad, mujeres, buenos libros y algunas cervezas. Por lo menos encuentro importante estas cosas. Salvador o M.M.M. podrían considerarlo.

En una mesa el seudo-intelectul revisa su libro mientras la mujer continúa con su bolso. Se contorsiona levemente. Creo que le gustan las drogas. Tal vez a todos nos gustan.



Witty Boy

1 comentario:

Shazz dijo...

(Cuando los post buenos quedan sin comentarios, se ofenden y no vuelven nunca más)